Corea del Norte ha declarado que sus últimas pruebas de misiles balísticos, ordenados y monitoreados personalmente por el líder supremo, simularon ataques nucleares contra objetivos de EE.UU. en Corea del Sur. «Durante el ejercicio se delimitó el alcance de tiro simulando ataques preventivos contra puertos y aeropuertos en el teatro operacional de Corea del Sur, donde será lanzado el equipo de la guerra nuclear imperialista de EE.UU.» cita la agencia nacional norcoreana KCNA el mensaje de las autoridades del país.
Este lunes Corea del Norte ha efectuado la prueba de tres misiles balísticos, de acuerdo con el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
Los misiles han sido lanzados desde la provincia de Hwanghae Septentrional y han volado entre 500 y 600 kilómetros, según los militares surcoreanos. Se estima que esta distancia es suficiente para alcanzar cualquier punto de Corea del Sur.
El lanzamiento ha tenido lugar poco después de que Corea del Sur y EE.UU. anunciaran la decisión final de desplegar el sistema antimisiles de THAAD (Defensa Terminal de Área a Gran Altitud, por sus siglas en inglés) en el sur de la península coreana. Según un comunicado de la semana pasada, los militares norcoreanos prometieron dar una «respuesta física» cuando se conociera dónde y cuándo se instalarían los componentes del nuevo sistema tierra-aire.