Amamos a nuestras mascotas y nos encanta demostrarle nuestro cariño, ¿no es cierto? Incluso hablamos con ellos, jugamos y compartimos muchísimos momentos de nuestra vida cotidiana. Pero lo que no debemos hacer es humanizarlos, porque podríamos estar ante un problema a futuro¿Qué es el antropomorfismo canino?
Hablamos de antropomorfismo cuando le atribuimos a nuestro perro características, emociones o hábitos que son propias de los seres humanos. Claro que nuestro perro también siente miedo, alegría, que razona, que recuerda y que tiene un sinfín de emociones, pero son propias de los perros. Y si abusamos de, por ejemplo, tenerlo en brazos todos los días como si se tratara de un bebé, eventualmente puede perder su identidad y generar frustración, ansiedad, inseguridad y otras emociones negativas, ¿sabías?
Cuando nuestros perros generan un desequilibrio emocional, generalmente deriva en problemas de comportamiento. Allí es cuando llegan los destrozos, cuando se muestran agresivos a otras personas, a otros perros o incluso hacia ti, cuando ladran por cualquier cosa y en exceso o cuando muestran signos de depresión.
¡Esto no significa que no tengas una buena relación con tu mascota ni puedas mostrarle tu cariño! Solo se trata de ser prudentes y estar, a veces, más atentos a nuestro propio comportamiento hacia ellos que al de ellos con el resto del mundo. Y hay sencillos principios para poder tener una excelente relación con nuestra mascota y no generar este tipo de problemas.Aprende sobre tu perro y su raza
No todas las razas tienen las mismas necesidades. Por propia naturaleza, algunos perros necesitan una actividad física y recreativa mucho más intensa que otros. Aprende sobre ellos, consulta a tu veterinario y aprovecha para fomentar todas aquellas actividades que harán de tu perro un perro feliz y libre de estrés.
¡Déjalo comportarse como un perro! Los perros huelen todo, olfatean y olisquean incluso las partes de otros perros. Déjalos que sigan sus instintos, sin ponerlos en peligro. No es una buena idea reprimir sus comportamientos y su intento de relacionarse con otros perros. Así también aprenden a interactuar incluso con la gente que no conocen. Evitarás que genere confusiones, se sienta molesto o incluso agresivo.¿Puedo deshumanizar a mi perro?
Si, claro que puedes hacerlo. Pero el principal punto a tener en cuenta es asumir la responsabilidad de haber fomentado este comportamiento en tu mascota. De esta manera, deberás entender que requerirá mucha paciencia y constancia el poder reeducar a tu perro.
No lo disfraces, no le agregues adornos y solo ponle aquellos accesorios que son estrictamente necesarios para su protección y para su identificación. Recuérdale sus límites, bájalo de la cama, aléjalo de la mesa a la hora de comer y hazlo de buena manera, pero con firmeza.
Déjalo experimentar, no lo sobreprotejas tanto. Tu perro es inteligente, sabrá resolver por sí mismo si se le presenta un obstáculo o un problema. Sácalo a pasear, llévalo con su correa pero déjalo investigar el mundo.
