A propósito de que este 4 de febrero es el Día Mundial contra el Cáncer, la oncóloga Rosa Batista explica a quiénes afecta cada tipo, cuáles son los signos de alerta y si es posible prevenirlos
Pese al llamado constante por parte de los profesionales de la salud, el cáncer sigue sumando víctimas a nivel mundial. La Organización Panamericana de la Salud estima que en 2022 hubo 20 millones de nuevos casos y 10 millones de muertes en todo el mundo.
En el caso específico de República Dominicana, no contamos con estadísticas nacionales que permitan conocer el panorama respecto a nuevos casos o muertes anuales. Sin embargo, gracias a los datos más recientes del Instituto Nacional del Cáncer Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares (Incart), se sabe que los cinco cánceres más frecuentes en el país son los de mama, próstata, cérvicouterino, colon y pulmón.
A propósito de que este 4 de febrero es el Día Mundial contra el Cáncer, Rosa Batista, oncóloga del Centro Médico de Diabetes, Obesidad y Especialidades (Cemdoe), explica a quiénes afecta cada tipo, cuáles son los signos de alerta y si es posible prevenirlos.
1. Cáncer de mama
Es el más común en las mujeres, pero se recuerda que también afecta a hombres. Si bien la edad de mayor incidencia está por encima de los 50 años, existe un número considerable de casos por debajo de los 40. Los signos de alerta más frecuentes son nódulos palpables, retracción del pezón y alteración de la piel de la mama.
Las causas que producen cáncer de mama todavía no están claras, pero existen factores de riesgos asociados, como la edad, la exposición a estrógenos endógenos (aparición temprana de la primera menstruación, menopausia tardía o nunca haber estado embarazada), terapia hormonal sustitutiva después de la menopausia, exposición a radiaciones ionizantes, alcohol u obesidad.
2. Cáncer de próstata
Se trata del segundo tipo más común. La edad promedio al momento del diagnóstico es de 65 años y puede estar acompañado de interrupción del chorro de la orina y dificultad o aumento de la frecuencia de orinar como síntomas iniciales. Los principales factores de riesgo son la edad avanzada, la raza negra y la historia familiar. Como estos factores no se pueden controlar, no se puede prevenir de forma segura.
3. Cáncer cervicouterino
El cáncer de cuello uterino, de cérvix o cervicouterino afecta a las mujeres y se puede diagnosticar mediante la prueba de Papanicolaou. Los síntomas pueden incluir sangrado transvaginal, dolor pélvico y molestias al orinar. La causa principal es la infección crónica del virus de papiloma humano, por lo que se puede prevenir con la vacuna contra VPH.
«Llevar una dieta balanceada, realizar ejercicio moderado de forma rutinaria y hacer chequeos médicos de forma periódica contribuyen a la reducción de riesgos de enfermedades crónicas, incluyendo el cáncer»Rosa BatistaOncóloga“
4. Cáncer colorrectal
Tiene una edad media de presentación de 60 años, pero puede aparecer también en personas más jóvenes, teniendo su incidencia mayor en hombres que en mujeres.
Dentro de los signos clínicos están los cambios en los hábitos intestinales (estreñimiento o diarrea), sangre en las heces fecales y dolor abdominal. El tabaco, el sedentarismo y las dietas inadecuadas (ricas en grasas y pobres en frutas y verduras) son de los principales factores de riesgo, al igual que condiciones preexistentes como pólipos, enfermedades intestinales inflamatorias y factores genéticos.
5. Cáncer de pulmón
Es la primera causa de muerte por cáncer a nivel mundial, siendo el tabaco el principal responsable de su desarrollo. En las personas que no fuman las causas pueden ser genéticas o ambientales. La exposición al humo de segunda mano, al gas radón o a la contaminación son algunos de los principales factores ambientales de cáncer de pulmón.
Entre los síntomas que presenta el cáncer de pulmón se encuentran la tos persistente, dificultad para respirar y dolor torácico.
Las causas exactas del cáncer no se conocen en la mayoría de los casos, aclara Batista, aunque existen factores de riesgo que favorecen su aparición. Hay factores modificables, que incluyen el consumo de tabaco y alcohol, infecciones, sedentarismo y dietas inadecuadas, y otros no modificables como la edad, el sexo, la raza, la herencia o genética.
«Llevar una dieta balanceada, realizar ejercicio moderado de forma rutinaria y hacer chequeos médicos de forma periódica contribuyen a la reducción de riesgos de enfermedades crónicas, incluyendo el cáncer«, concluye.
Fuente-Diario Libre.