SANTO DOMINGO. Los hogares dominicanos registraron una mejora de sus ingresos de 8.7% en términos reales, de acuerdo con los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) a octubre de 2016.
El “Boletín de Estadísticas Oficiales de Pobreza Monetaria” que publica la entidad señala que los factores que incidieron en el incremento fueron los ajustes salariales combinados con una baja inflación durante ese período. De esta manera, resalta que el ingreso laboral subió 7.9% entre 2015 y 2016. Entre tanto, la inflación reportada por el Banco Central de la República Dominicana (BCRD) terminó en 1.70% al cierre del año pasado.
Según los registros publicados por la ONE, es el mejor resultado de los últimos tres años.
En términos nominales -es decir, sin tomar en cuenta el efecto inflacionario-, el ascenso de los ingresos per cápita de los hogares fue de 10.6% para ese período.
Ese comportamiento permitió una reducción de 1.9 puntos porcentuales de la tasa de pobreza monetaria en la República Dominicana, a 30.5% en 2016, pero eso no trajo consigo disminuir los niveles de desigualdad en el país. Al contrario, la ONE reportó en su publicación que la brecha de ingresos aumentó 1.7% durante el año 2016, lo que significa que la concentración de la riqueza nacional aumentó entre los más ricos en el último año.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) considera que la desigualdad en la distribución de los ingresos es uno de los problemas estructurales que enfrenta la República Dominicana y que, además, implica un freno importante para seguir reduciendo la pobreza monetaria, “a pesar de las altas tasas de crecimiento registradas por la economía nacional”, indicó el organismo en un informe publicado el año pasado.
La economía dominicana acumula años de elevada actividad económica. El año pasado el Producto Interno Bruto (PIB) creció 6.6%, de acuerdo con los datos del BCRD. Justamente el gobernador del ente emisor, Héctor Valdez Albizu, señaló a inicios de año, cuando presentó los datos económicos de 2016, la necesidad de que el crecimiento económico se derrame a toda la sociedad.
Al cierre del año pasado, el nivel de recursos públicos destinado a las subvenciones sociales se mantuvo sin mayores cambios. Según los datos de la Dirección General de Presupuesto, en 2016 se dispuso un monto total de RD$58,196.6 millones para financiar programas gubernamentales que abarcaron desde la asignación de pensiones a personas mayores, las ayudas por invalidez, así como la atención a familias en situación de exclusión social, incluyendo programas de viviendas sociales.
Esa cantidad representó 1.75% del PIB, un nivel apenas por encima del gasto público dirigido a protección social un año antes, cuando equivalió a 1.68% del PIB, un total de RD$55,810.9 millones.
