En la más reciente rendición de cuentas del presidente Danilo Medina, la mujer ocupó, como de costumbre, un sitial preponderante en su discurso, pero más importante aún, fue la confirmación de que su visión de Estado pasa en gran parte por rescatar una parte vital de la población que había vivido rezagada durante años, y con ello, el rezago propio de la economía y la sociedad dominicana.
En dicho discurso, citó por ejemplo, que en turismo, motor económico junto con la minería, el 54% de los puestos de trabajo que se generan en el sector son ocupados por mujeres, quienes son mayoría cuando hablamos de liderar un hogar en términos familiares y económicos donde solo hay uno de los dos padres.
De ahí que la independencia económica sea fundamental para la mujer en su desarrollo integral, esto reflejado en el hecho de que entre 2013 y 2018 se dispusieron $27,000 millones de pesos en créditos, de los cuales, el 70% estuvo destinado a emprendimientos liderados por mujeres en pequeños y medianos negocios en todo el territorio nacional.
Emprendimientos
De esos emprendimientos se ha alimentado la base de proveedores del Estado. Al día de hoy, ya son más de 77 mil proveedores, de los cuales 18% son mujeres. Aunque resta un largo camino para que ese porcentaje llegue o supere la mitad, es considerable el incremento proporcional de un 473% en el último año.
Si la mujer de la ciudad es importante, igual o más lo es la mujer rural. De hecho, República Dominicana es el segundo país de América Latina y el Caribe en cuanto a participación femenina en la producción agrícola con más del 31.2%, un paso fundamental para erradicar la desigualdad de género, mediante el acceso a la tierra con títulos de propiedad, créditos y sobre todo, con el acceso a una mejor calidad de vida.
En salud, se trabaja fuertemente con alianzas multisectoriales para enfrentar los feminicidios.
En nuestro caso, en la ONE, realizaremos una encuesta sobre esta problemática en los próximos meses con el apoyo del Ministerio de la Mujer y el BID.
Igual, se avanza de manera acelerada en atajar problemáticas como el embarazo en adolescentes, ámbito que abordaremos en la más reciente Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples (ENHOGAR).
En tanto, el desafío es mayúsculo en cuanto a violencia, pero los planes integrales del Gobierno comienzan a dar resultados. Solo en el 2018, los feminicidios se redujeron en un 22%, gracias al trabajo mancomunado e interinstitucional, que además de trabajar con las causas, se ha reforzado la labor con las víctimas con las nuevas casas de acogida para mujeres, niños, niñas y adolescentes.
Finalmente, la visión de un Estado igualitario del presidente Danilo Medina está anclado a la igualdad en acciones concretas, políticas públicas y resultados palpables.
De esa sinergia pública, privada y multilateral nace la iniciativa de paridad de género, para incrementar la participación de mujeres en la fuerza laboral, más en el ámbito remunerado; reducir la brecha salarial de género, y promover de manera activa la inclusión de mujeres en puestos de liderazgo, decisión y determinación del futuro de la República Dominicana.
En el 2019, con relación al 2012, hay más y mejores oportunidades para la mujer dominicana; la de la ciudad, la del campo, la que nació con poco y la que tiene mucho. Todas sin excepción, son protagonistas bajo este gobierno histórico que tiene aún mucho por entregar en pos de la igualdad, la equidad y el desarrollo integral y sostenible del país.
