Taiwán está de fiesta. No solo por la celebración de su Fiesta Nacional, el pasado martes de la presente semana. Desde el próximo jueves 19 de octubre hasta el 1 de noviembre, la Cinemateca Dominicana acogerá la mayor muestra de cine taiwanés que se haya proyectado en la República Dominicana. Son unas 16 películas de algunos de los más importantes realizadores del cine oriental de hoy. Como la muestra es tan amplia y diversa, en esta columna van nuestras recomendaciones.
La cinta que inaugura la muestra, “Alma” (2013) no debe pasar inadvertida no solo por estar filmada por un maestro de la categoría de Chung Mong-Hong, ni por las excelencias de su guion, sino por su cinematografía vanguardista.
Elaborada con bajo presupuesto, al igual que todo el cine de este director, el filme presenta un ejemplar manejo de la cámara que convierte esta historia de trastornos de la personalidad en una mágica estampa del séptimo arte. De este mismo director también recomendamos “El cuarto retrato” (2008) una de las mejores películas producidas en Taiwán en los últimos años, premiada en el Festival de Mar del Plata..
La ópera prima del laureado Ang Lee, (Brokebach moun tain, 2005); “Life of Pi”, (2012), “Manos que empujan” (1992), anuncia la mirada occidental de este director que no ha dejado nunca de ser taiwanés, a pesar de desarrollar el grueso de su cine lallende los mares. El drama del emigrante a los Estados Unidos y su voluntad de abrirse paso, se retrata en una pieza que vislumbra grandeza.
Los dominicanos tendremos la oportunidad de disfrutar la también ópera prima de Lee Chang Dong, “Los rebeldes del Dios Neón” (1992), un filme lleno de excelencias que marcó el debut de uno de los realizadores fundamentales del nuevo milenio, tanto dentro como fuera de Asia. El director resume en tres jóvenes de características disímiles, la irreverencia de quienes no son aceptados social y familiarmente, por marcar diferencias con el status quo de la sociedad donde viven. Elementos simbólicos del cine de este director como el agua, la lluvia y los insectos, surgen en esta historia como protagonistas de la rebeldía a la que se canta como atributo a la libre personalidad juvenil.
De Hou Hsiao-Hsien se exhibirá “Polvo en el viento”, otro clásico producido en Taipéi, un filme apasionante, cruce de culturas y experiencias entre unos personajes que se mueven en bajo perfil dentro de una sociedad que salía a flote por su laboriosidad y espíritu de sacrificio. Una película que a pesar de inaugurar el catálogo de este director, no deja de ser un desafío apasionante, ante uno de esos momentos donde se impone el simple entretenimiento por encima de los valores y la identidad de un país.
No podemos dejar de menciona “Monga” (2010), de Doze Niu, una arriesgada pieza que relata la lucha entre bandas mafiosas en el barrio más controversial de Taipéi (Monga), similar al Capotillo dominicano, donde las autoridades son desafiadas constantemente y donde impera la corrupción, la delincuencia y la prostitución en todas sus formas, un barrio gobernado por bandas del bajo mundo donde la vida, la amistad y hasta las relaciones interpersonales tienen un precio. Esta pieza fue preseleccionada por Taiwán como “Mejor película de habla no inglesa” a los Premios Oscar de ese año.
“Cómplices” y “Un lugar en la tierra de los sueños” (2002) son otras dos propuestas de interés que se proyectarán en esta muestra y que Listín Diario recomienda a sus lectores.
