¿Buscas mantener tu cerebro saludable durante la vejez?
No hay maneras comprobadas de evitar el declive mental o demencia senil, pero un nuevo reporte dice que hay indicios de que el ejercicio, control de presión arterial y algunos tipos de entrenamiento mental podrían ayudar.
Sin tener pruebas, el gobierno no debería de comenzar una campaña de salud pública promoviendo estrategias de salud cerebral para la vejez, dijo las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina en un informe divulgado el jueves.
Al público se le debería de decir que las evidencias son «alentadoras» pero inconclusas, agregó el reporte. De esa manera, la gente puede usar la información para decidir si es que invierte tiempo y dinero en diversas estrategias.
Las tres estrategias resaltadas «no hacen daño», dijo el neurocientífico Alan Leshner, presidente del comité de las Academias Nacionales.
«Al menos dos de ellas son realmente buenas para uno» incluso si el vínculo con el cerebro no resulta ser cierto.
Los científicos saben que cambios riesgosos en el cerebro comienzan décadas antes de que Alzheimer y otros tipos de demencia sean evidentes, lo que indica que existe un período en el que la gente puede fortalecer su salud cognitiva. Pero el informe dice que los estadounidenses cuentan con una «desconcertante» disponibilidad de productos y estrategias para mantener saludable el cerebro pese a que hay pocas, si acaso alguna, evidencias científicas rigurosas que las respalden.
El Instituto Nacional sobre la Vejez pidió a las prestigiosas Academias Nacionales que analice el asunto. El comité dijo que hay tres estrategias que podrían ser estudiadas más de cerca para ver si es que realmente sirven de ayuda:
– Controlar la presión arterial, especialmente entre la gente de mediana edad. La gente con hipertensión necesita tratamiento de todos modos para evitar enfermedades cardiacas y derrames cerebrales.
– Más actividad física. Al igual que el consejo sobre la presión arterial, desde hace mucho que se considera que lo bueno para el corazón es bueno para el cerebro.
– Capacitación cognitiva, específicamente técnicas con la meta de mejorar el razonamiento, resolver problemas, la memoria y la agilidad del proceso mental.