El Papa Francisco advirtió hoy que el clero debe estar distante del poder, de las comodidades y seguridades mundanas. Las definiciones del pontífice, si bien abarcan a los dignatarios católicos de todo el mundo, se interpretaron como un llamado de atención a los eclesiásticos polacos, muchos de los cuáles están cercanos al actual gobierno de tinte nacionalista de su país e incluso algunos tienen una vida acomodada.
De hecho, Francisco hizo la exhortación durante la misa que ofició para los sacerdotes, religiosos, religiosas y seminaristas en el moderno santuario dedicado a san Juan Pablo II. Además, ante un clero de mayoría conservadora, les pidió a no quedar encerrados en sí mismos “por miedo o comodidad” y que salgan al encuentro de la gente con una actitud no dura, sino misericordiosa.
“(Quien optó por la vocación religiosa) huye de las situaciones gratificantes que lo pondrían en el centro, no se sube a los estrados vacilantes de los poderes del mundo y no se adapta a las comodidades que aflojan la evangelización; no pierde el tiempo en proyectar un futuro seguro y bien remunerado, para evitar convertirse en aislado y sombrío, encerrado en las paredes angostas de un egoísmo sin esperanza y sin alegría”, dijo.
«El Señor…huye de las situaciones gratificantes que lo pondrían en el centro, no se sube a los estrados vacilantes de los poderes del mundo y no se adapta a la comodidades que aflojan la evangelización», recordó el pontífice durante la misa solemne ante más de dos mil religiosos, entre ellos la jerarquía de la iglesia polaca, tradicionalmente muy cercana al poder político.
Jorge Bergoglio dedicó parte de su penúltima jornada en Polonia a rendir homenaje a la figura carismática de Juan Pablo II, que reinó por 27 años y que marcó la historia de la Iglesia católica de finales del siglo XX.
Después de rezar en la capilla de santa Faustina, una mística polaca que fue canonizada durante el pontificado de Juan Pablo II, visitó el santuario del papa polaco, construido en Lagiewniki, la fábrica de soda donde trabajó durante su juventud Karol Wojtyla.
El recinto acoge reliquias del pontífice polaco, aunque su cuerpo está enterrado en la basílica de San Pedro en el Vaticano.
Vigilia. Miles de jóvenes se preparan para la vigilia de oración en el Campo de la Misericordia, en las afueras de la capital polaca. /EFE
Para muchos polacos, Francisco sigue siendo el número dos, una rivalidad que los organizadores del viaje papal han evitado reforzar, ya que se notan pocas fotos, pancartas, y banderolas en las calles dedicadas a los dos pontífices.
Antes de la misa, el Papa atravesó la puerta santa del santuario, como los cientos de miles de jóvenes de todo el mundo que llegaron a Cracovia para la Jornada Mundial de la Juventud.
Después confesó en español, francés e italiano a ocho personas, cinco mujeres, tres hombres, uno de ellos cura.
