Los ingresos fiscales relacionados con el turismo generaron el año pasado más de RD$6,811 millones, y ya para el primer semestre del año en curso esas entradas ascendían a RD$3,942 millones, conforme a cifras preliminares publicadas por el Banco Central. Esos recursos, que se generan por los impuestos y las tasas a turistas, son indicadores de que se trata de un sector económicamente relevante para la economía nacional, por lo que urgen acciones que protejan la actividad de fenómenos que la ponen en riesgo. El cambio climático es uno de ellos.
El turismo dominicano fundamenta su oferta en sol y playa, por lo que se desarrolla mayormente en zonas de costa, las que se extienden a lo largo de 1,576 kilómetros. Uno de los impactos del cambio climático es la subida en los niveles de mares y océanos, confirma el Panel Intergubernamental de Cambio Climático en su quinto informe: “Las emisiones de CO≤ inducirán a olas extremas de calor, aumento del nivel del mar, al deshielo y a climas extremos”.
Un análisis de vulnerabilidad realizado en los sectores costeros turísticos de Bávaro-Punta Cana y de Puerto Plata-Sosúa por el especialista Alejandro Herrera, presidente e investigador del Programa EcoMar, arrojó altas vulnerabilidades ante el cambio climático.
“Ninguna otra industria socioeconómica de la zona costera depende tanto de recursos naturales bien conservados que la turística. Esto es en tal medida que puede afirmarse con toda seguridad que sin anchas playas de arena blanca, aguas transparentes, paisajes naturales atractivos, arrecifes coralinos coloridos y exuberantes y recursos pesqueros abundantes y sanos, el turismo costero no existiría”, refiere Herrera al señalar la magnitud del impacto que tendría el cambio climático en el turismo.
En cuanto a las implicaciones socioeconómicas, advierte que si bien las mayores pérdidas de capital las tendría el inversionista, las poblaciones costeras también resultarían afectadas debido a que han creado un vínculo económico estrecho con la industria turística. Advierte que las pérdidas económicas podrían extenderse a otros sectores económicos que abastecen la demanda turísticas en sus respectivos rubros, como el agrícola y el pesquero.
El presidente de EcoMar propone implementar estrategias de adaptación en el sector turismo que reduzcan al mínimo los efectos adversos del cambio climático. En ese tenor sugiere reducir la contaminación, la protección y siembra de corales que ayuden a crear una barrera que proteja la costa y que a la vez funja como sumidero de dióxido de carbono, evitar nuevas presiones que reduzcan la capacidad de los ecosistemas de responder al cambio climático y prevenir la fragmentación de los ecosistemas, puesto que la conexión entre ecosistemas hace posible la migración de especies en respuesta al cambio climático.
Recomienda, además, evitar los usos extractivos y proteger la diversidad biológica, “pues son actividades conducentes a mantener e incrementar la capacidad de recuperación y adaptación de los ecosistemas de forma que continúen prestando servicios importantes bajo distintas condiciones climáticas”.
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IMPACTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN TURISMO
Infraestructuras:
* El ascenso del nivel del mar sumergirá infraestructuras turísticas cercanas a la costa.
* El incremento de la frecuencia y magnitud de los eventos meteorológicos extremos, también asociados al cambio climático, implica pérdidas en infraestructura.
* Las infraestructuras turísticas pueden verse afectadas por las inundaciones producto de la lluvia o la acción del oleaje producto de un mayor nivel del mar.
* Cambios en la estacionalidad climática que rompen los patrones del flujo de turistas.
* Paisaje costero modificado por el incremento de la erosión, el afloramiento de roca y la pérdida de la vegetación natural.
* Playas arenosas reducidas producto de la erosión, originando que su capacidad de carga de turistas disminuya.
* Intrusión salina por la combinación del ascenso del mar y la reducción de precipitaciones, lo que puede implicar la pérdida de calidad de las reservas de agua potable.
* Los volúmenes de agua potable en las cuencas pueden reducirse por la sequía, creando problemas de abastecimiento a la población turística.
* Incremento en los costos de irrigación de los campos de golf debido a la reducción de las lluvias y al incremento de las temperaturas, con un consecuente aumento de la tasa de evapotranspiración, efectos asociados al cambio climático.
* El aumento de temperatura incrementa la posibilidad de insolación, quemaduras o enfermedades de la piel por exposición al sol.
*El buceo ecoturístico puede verse afectado por la pérdida del valor paisajístico de los arrecifes coralinos por blanqueamiento.
*La pérdida de los arrecifes desprotege la costa y se acelera la destrucción por los procesos erosivos.
*Los cambios en el aporte de material carbonatado por daños a los arrecifes pueden implicar una reducción o pérdidas de las playas arenosas.
