El presidente Tabaré Vázquez recibió ayer en su oficina al mandatario electo Luis Lacalle Pou, de un partido opositor, para iniciar una transición de ordenada que pondrá fin a 15 años de gobierno de la coalición de izquierda Frente Amplio.
“Apertura, diálogo. Será una transición como siempre supusimos, a la uruguaya. Nosotros estamos acostumbrados, pero en otros países nos miran con cierta envidia de que somos capaces de hacer estas cosas y tenemos que cuidarlas”, dijo Lacalle Pou en una rueda de prensa tras el encuentro y destacó el “republicanismo” de Vázquez. “Era una reunión que hace tiempo la veníamos soñando y preparando”, agregó.
Vázquez no hizo declaraciones a la prensa, pero miembros de su equipo destacaron el afán de colaborar con el próximo gobierno.
“Vamos a poner todo de nosotros para lograr la mejor transición, en el entendido de que esto es lo mejor para la gente”, dijo Álvaro García, director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, uno de los funcionarios gubernamentales designados para trabajar en la transición con el futuro gobierno.
Crisis del gobierno
Aprobación
El tercer gobierno del Frente Amplio encabezado por el saliente Tabaré Vázquez tuvo problemas importantes y finaliza con un índice de aprobación muy inferior a los anteriores. Y con el déficit fiscal que trepó al 4,9%.
